EL BOQUERÓN DE VALDECABRAS
En una entrada anterior fuimos a Valdecabras despues de una
temporada de lluvias en donde en determinados parajes de su termino, empiezan a
aparecer surgencias de agua, conviertiendole en un paraíso del agua en
borbotones.
Por aquel entonces, me deje para otra ocasión, una
surgencia, posiblemente la mayor de esta zona. ¿Que por qué me la deje?
Pues por que hoy vamos a hacer un poco de espeleología. La
surgencia en cuestión conocida como el Boquerón de Valdecabras es una cueva
activa, es decir, funciona como colector por donde van a salir las aguas
después de una temporada de lluvias, teniendo que entrar en ella en temporada
seca, veranos o sequías (que palabra más odiosa esta última).
Al igual que ya hice con la Cueva del tío Manolo, os voy a
enseñar esta peculiar cueva por dentro y luego os voy a enseñar cuando pega su
pequeño reventón, brotando agua de una manera absolutamente maravillosa por ese
“oleoducto” natural.
Vámonos al precioso valle donde está ubicado el pueblo de Valdecabras.
En esta foto podemos ver como por el fondo del barranco baja agua en regueros.
Ocupando el agua también la senda que baja por aquí.
Ojo, como arrambla!!
Esta agua viene a salir de la fuente de la Canaleja que suelta agua a espuertas.
Todo el agua de lluvia que cae en la Muela y Sierra de Valdecabras, viene a salir por estas laderas que conforman el valle de Valdecabras.
Surgencias que salpican el paraje como hongos en otoño.
Un ruido atronador nos indica que estamos llegando al Boquerón de Valdecabras.
De ese agujero que se ve arriba sale agua espumosa a rabiar y con mucha fuerza.
¡¡Oooooohhhhhhh!!
Vean que de la derecha viene a salir de un grieta otro buen chorro de agua.
Absolutamente fascinante, como de esa tubería natural y perfecta viene a salir todo el agua.
Esta claro que estamos ante una cueva activa, un fenómeno tan usual y maravilloso en la Serranía de Cuenca. Ahora vamos a retroceder unos meses, más o menos al principio del otoño anterior, para visitar la Cueva del Boquerón de Valdecabras.
Ale hop, subamos ahora que esta seca.
¿Espeleo? pues como siempre me acompaña mi hermano pequeño.
Comprobamos que este principio sigue la forma de galería circular.
Y que va teniendo agua. Aunque echando agua lo vimos a posteriori, sabíamos que es una cueva activa.
Lo que vemos rápidamente que es un cueva que vamos a acabar "doblaos" pues en ningún momento te puedes poner de pie.
Pero va teniendo cada vez más rincones bonitos.
Y cuando llevamos un rato van apareciendo las preciadas formaciones.
En esta maravilla de estalactita.
¿Bonito, verdad?
Mientras tanto, nos vamos diciendo a ver si encontramos alguna pequeña sala que nos podamos poner de pie y estirarnos, pero parece que vamos a salir hechos unos Quasimodos.
Lo curioso de esta cueva es que empiezan a aparecer estalactitas excéntricas, es decir, esas que salen hacia los lados o hacia arriba.
Vean aquí el techo con unas cuantas de ellas.
Selfie cavernoso estalactitero.
La galería sigue con el techo tapizado de mini estalactitas excéntricas.
Román flipando de estas obras de arte.
¿Y qué me dicen de estas?
Seguimos, cada vez esta peor!
Por aquí nos damos cuenta que comenzamos a llevar un curso de agua constantemente.
Hasta que ahí delante, decidimos volvernos, pues ya hay mucha agua, habiendo un poco más adelante un sifón, que ya hace falta controlar de espeleobuceo.
De camino de vuelta aún nos hacemos unas estalacfotitos!
¡¡la Luuuz!! Esta increíble sensación de salir de la cueva solo la pueden explicar los que hacen espeleo.
Ahí estoy yo, completamente doblao, y sudando de lo lindo.
Y mi hermano igual que yo, deseando ir al bar del pueblo a celebrar esto.
Y con esta vista del valle de Valdecabras con el agua de la Canaleja y la del Boquerón corriendo por él, nos despedimos hasta la semana que viene!
En la entrada de abajo os dejo un video con el pequeño reventón del Boquerón de Valdecabras. ¡Que lo disfrutéis!
Vámonos al precioso valle donde está ubicado el pueblo de Valdecabras.
En esta foto podemos ver como por el fondo del barranco baja agua en regueros.
Ocupando el agua también la senda que baja por aquí.
Ojo, como arrambla!!
Esta agua viene a salir de la fuente de la Canaleja que suelta agua a espuertas.
Todo el agua de lluvia que cae en la Muela y Sierra de Valdecabras, viene a salir por estas laderas que conforman el valle de Valdecabras.
Surgencias que salpican el paraje como hongos en otoño.
Un ruido atronador nos indica que estamos llegando al Boquerón de Valdecabras.
De ese agujero que se ve arriba sale agua espumosa a rabiar y con mucha fuerza.
¡¡Oooooohhhhhhh!!
Vean que de la derecha viene a salir de un grieta otro buen chorro de agua.
Absolutamente fascinante, como de esa tubería natural y perfecta viene a salir todo el agua.
Esta claro que estamos ante una cueva activa, un fenómeno tan usual y maravilloso en la Serranía de Cuenca. Ahora vamos a retroceder unos meses, más o menos al principio del otoño anterior, para visitar la Cueva del Boquerón de Valdecabras.
Ale hop, subamos ahora que esta seca.
¿Espeleo? pues como siempre me acompaña mi hermano pequeño.
Comprobamos que este principio sigue la forma de galería circular.
Y que va teniendo agua. Aunque echando agua lo vimos a posteriori, sabíamos que es una cueva activa.
Lo que vemos rápidamente que es un cueva que vamos a acabar "doblaos" pues en ningún momento te puedes poner de pie.
Pero va teniendo cada vez más rincones bonitos.
Y cuando llevamos un rato van apareciendo las preciadas formaciones.
En esta maravilla de estalactita.
¿Bonito, verdad?
Mientras tanto, nos vamos diciendo a ver si encontramos alguna pequeña sala que nos podamos poner de pie y estirarnos, pero parece que vamos a salir hechos unos Quasimodos.
Lo curioso de esta cueva es que empiezan a aparecer estalactitas excéntricas, es decir, esas que salen hacia los lados o hacia arriba.
Vean aquí el techo con unas cuantas de ellas.
Selfie cavernoso estalactitero.
La galería sigue con el techo tapizado de mini estalactitas excéntricas.
Román flipando de estas obras de arte.
¿Y qué me dicen de estas?
Seguimos, cada vez esta peor!
Por aquí nos damos cuenta que comenzamos a llevar un curso de agua constantemente.
Hasta que ahí delante, decidimos volvernos, pues ya hay mucha agua, habiendo un poco más adelante un sifón, que ya hace falta controlar de espeleobuceo.
De camino de vuelta aún nos hacemos unas estalacfotitos!
¡¡la Luuuz!! Esta increíble sensación de salir de la cueva solo la pueden explicar los que hacen espeleo.
Ahí estoy yo, completamente doblao, y sudando de lo lindo.
Y mi hermano igual que yo, deseando ir al bar del pueblo a celebrar esto.
Y con esta vista del valle de Valdecabras con el agua de la Canaleja y la del Boquerón corriendo por él, nos despedimos hasta la semana que viene!
En la entrada de abajo os dejo un video con el pequeño reventón del Boquerón de Valdecabras. ¡Que lo disfrutéis!
magnifico todo, gracias por publicarlo
ResponderEliminarHola Francisco.
EliminarEncantado que te guste. Todos los lunes cuelgo una entrada nueva.
Un saludo.
Hola Toni.
ResponderEliminarTus entradas nunca dejan de sorprenderme, primero con todos esos regueros naturales corriendo a tutiplén por el monte, y luego que decir de la visita a esa surgencía, una gozada poder entrar en ella cuando se seca y fascinante como siempre el introducirte en las fauces de la tierra y abrirte paso en la más profunda oscuridad y descubrir los pequeños tesoros que esconde.
Yo solo he hecho dos veces espeleo en serio, y supongo que a ti te pasará igual, pero ambas veces he tenido la sensación de que el tiempo se detiene ahí abajo...
Un abrazo.
Hola Dani.
EliminarEsa sensación que comentas es lo que me llama poderosamente de la espeleo.. Siempre digo que es como desaparecer de la faz de la tierra y sumirte en un tiempo y un lugar sin latidos y sin sol.
Por lo que leí de tus entradas de cuevas, te gusta la espeleo pero tienes mal recuerdo de ellas. No? Yo creo que al principio solo hay que hacer cuevas horizontales y dejar para mucho más adelante las verticales para entrar a simas. Endurece mucho la experiencia haciendo que se te quede un regustillo agrío. Mi hermano por ejemplo, me dice que le llame para cuevas horizontales, pero para verticales ni de asomo. Las tres únicas simas que hicimos las paso realmente canutas.
Y la otra cosa, es de hacer cuevas que no tengan muchos tramos de gateras. Hay que ir poco a poco, pienso yo. En Cuenca hay una que yo por ahora no quiero hacerla que tiene: agarrate!! 800 metros de gatera!! Unos dicen que si quieres aborrecer la espelo haz esa cueva. También se dice que después de esos 800 m y tras andar un rato llegas a una sala de aragonitos (esto ya no sé si será verdad). Pero vamos, lo que te quiero decir, que cueva con mucho reptar por ahora no las voy haciendo.
Un abrazo.
Hola Toni
ResponderEliminarQue maravilla!!!
Hay que ver lo que esconde la tierra en sus entrañas, esta cueva con ese agua y además tan cristalina es digno de ver.
Nunca he entrado en una cueva de ese tipo, pero con un buen equipo, no me importaría.
Un saludo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose.
EliminarEste tipo de cuevas ya ves que son facilitas y no requieren de mucho. Solo no tener claustrofobia y luego con una luz normalita ya es suficiente. Un mono de albañil y un buen casco y ya es suficiente.
Lo bueno que estas son cuevas activas, pero son las menos, aunque en la Serranía tenemos de unas cuantas que son activas. Generalmente serán cuevas secas.
Un saludo.
Hola Toni.
ResponderEliminarQue maravilla ver bajar tanto agua por aquellas laderas. De la fuente de la Canaleja me he traído un buen maletero lleno de garrafas para casita cada vez que paso por allí; ¡¡que agua!!
La verdad que os admiro contemplando vuestras incursiones subterráneas. Gracias por mostrarnos esa otra Magia Serrana y, lo dicho; mucho cuidadín por ahí adentro.
Por cierto, con la que ha caído en Fuentes, el río Moscas tiene que bajar tremendo, amén de todas esas innumerables torrenteras serranas.
Un abrazo.
Hola Andrés.
EliminarYa somos dos que se han traido agua de la Canaleja a casa. Encantando que os guste esta cueva tubería.
Mi iba a ir hoy a Fuentes a hacer fotos al Moscas, pero hoy es que ha estado de tormentas también. Mañana casi con total seguridad me acercaré. Es casi inexplicable que el Moscas que nace detrás y es una rambla seca acumule tanta agua. Pero bueno...agua para el Júcar y para el embalse de Alarcón. Si esa cantidad de agua cae más en la sierra no habría habido tanto problema pues el pinar y la vegetación se lo hubieran chupado, pero Fuentes y gran parte de su termino esta pelado. Así ha pasado.
Un abrazo.