LAS CASCADAS DE LAS CASAS DEL RÍO
En esta entrada voy a volver a ponerme el traje de cazador de cascadas y nos vamos a ir a aquella parte de la Serranía de Cuenca que me gusta mucho recorrer, más concretamente la parte del Alto Cabriel recién entrado en la provincia de Cuenca, entre la Sierra de Zafrilla y la Sierra del Escornadero.
También es legítimo que se pregunten: - Y que zona de la Serranía no le gusta andar al dueño de este blog? pues la verdad que me gusta recorrer toda de cabo a rabo, pero luego hay áreas y zonas que sea por la circunstancia que sea, me gustan mucho. No más que otras, pero me gustan mucho. ¡¡Vaya perogrulladas que suelto!!
Iremos hasta Salvacañete para coger esa carretera de montaña que remonta el Cabriel y nos lleva a ignotas sierras turolenses, para coger el desvío por carril, que nos lleva a la bonita aldea de La Nogueruela y de ahí bajaremos al joven Cabriel para buscar estas cascadas.
Subimos por la carretera, mientras vemos como el Cabriel baja raudo por ese gran cañón camino de Salvacañete. En este punto el río se mete por una hosca y tupida garganta y la carretera se va por otro lado.
Aquí ya hemos cogido el desvío por carril hacia la Nogueruela y los Cortijos, viendo el valle por donde hemos venido con el arroyo del agua en el fondo, un pequeño arroyo afluente del Cabriel.
Desde arriba podemos ver ese valle cañón que va creando el Cabriel.
Cáspita!! que sorpresa encontrarme nieve en estas altas y frías lomas azotadas por mil vientos inclementes.
Pese a que era un día soleado y parecía bueno, el frío era glacial y cortante.
Estas altas lomas son tierra para las duras Sabinas.
Por ejemplo, esta maravilla y hermosura de ejemplar.
Una vez pasado la Nogueruela debemos seguir el carril y comenzar a bajar.
Desde aquí arriba oteamos el valle del Cabriel con la casa del Río abajo. Me imagino que sería un antiguo Molino (o Herrería).
Y digo Herrería, pues por allí abajo me encontré con esto.
Foto más cercana de la Casa del Río, donde se puede apreciar que esta reformada y preciosa.
De todas formas bajemos hasta poder ver ya el Cabriel.
Iremos río abajo hasta que nos encontremos con esta maravilla.
Esta cascada tiene como tres pisos de caída y bastante alta.
Ya tengo a mi presa conseguida y hay que inmortalizarlo.
Vean como la cascada hace un larga cola a modo de tobogán.
Aquí lo más cerca posible.
La confluencia del arroyo que viene a nacer arriba en la Nogueruela en el Cabriel.
Último vistazo a la cascada mientras seguimos río abajo.
No os he presentado al joven río Cabriel que por aquí lleva poco recorrido aún.
También es legítimo que se pregunten: - Y que zona de la Serranía no le gusta andar al dueño de este blog? pues la verdad que me gusta recorrer toda de cabo a rabo, pero luego hay áreas y zonas que sea por la circunstancia que sea, me gustan mucho. No más que otras, pero me gustan mucho. ¡¡Vaya perogrulladas que suelto!!
Iremos hasta Salvacañete para coger esa carretera de montaña que remonta el Cabriel y nos lleva a ignotas sierras turolenses, para coger el desvío por carril, que nos lleva a la bonita aldea de La Nogueruela y de ahí bajaremos al joven Cabriel para buscar estas cascadas.
Subimos por la carretera, mientras vemos como el Cabriel baja raudo por ese gran cañón camino de Salvacañete. En este punto el río se mete por una hosca y tupida garganta y la carretera se va por otro lado.
Aquí ya hemos cogido el desvío por carril hacia la Nogueruela y los Cortijos, viendo el valle por donde hemos venido con el arroyo del agua en el fondo, un pequeño arroyo afluente del Cabriel.
Desde arriba podemos ver ese valle cañón que va creando el Cabriel.
Cáspita!! que sorpresa encontrarme nieve en estas altas y frías lomas azotadas por mil vientos inclementes.
Pese a que era un día soleado y parecía bueno, el frío era glacial y cortante.
Estas altas lomas son tierra para las duras Sabinas.
Por ejemplo, esta maravilla y hermosura de ejemplar.
Una vez pasado la Nogueruela debemos seguir el carril y comenzar a bajar.
Desde aquí arriba oteamos el valle del Cabriel con la casa del Río abajo. Me imagino que sería un antiguo Molino (o Herrería).
Y digo Herrería, pues por allí abajo me encontré con esto.
Foto más cercana de la Casa del Río, donde se puede apreciar que esta reformada y preciosa.
De todas formas bajemos hasta poder ver ya el Cabriel.
Iremos río abajo hasta que nos encontremos con esta maravilla.
Esta cascada tiene como tres pisos de caída y bastante alta.
Ya tengo a mi presa conseguida y hay que inmortalizarlo.
Vean como la cascada hace un larga cola a modo de tobogán.
Aquí lo más cerca posible.
La confluencia del arroyo que viene a nacer arriba en la Nogueruela en el Cabriel.
Último vistazo a la cascada mientras seguimos río abajo.
No os he presentado al joven río Cabriel que por aquí lleva poco recorrido aún.
Hasta que llegamos al pequeño caserío de las Casas del Río.
Donde se intuye un rincón detrás del caserío muy prometedor.
Y otro arroyo que viene del fondo.
Donde cae un pequeña chorrera de arriba. Aunque es raro pues el cauce abajo lleva más agua de lo que cae por esa cascada.
A lo que descubro en ese cueva llena de vegetación un manantial.
Cuando el frío y el hielo hacen acto de aparición, yo soy un tío feliz.
Las vistas hacia el frente son gloriosas.
Aquí abajo, en este tremendo rincón, debajo de la cascada, al lado del manantial, y enfrente de la cueva, viene a mí la Magia Serrana.
Vean a la izquierda de la caída del agua en cascada, como se ve agua que viene de la cueva del manantial.
Después de esta cascada, seguir río abajo es de insconcientes, ya que la vegetación es tremenda y no hay senda ninguna. Por lo que vamos a remontar río arriba por donde hemos venido y un poco más río arriba desde donde empezamos a andar nos encontramos con esto.
Lo que le entra a la derecha al Cabriel es su primer gran afluente, el río Zafrilla.
Cruzaremos el Cabriel por el puente del Peralejo.
Comenzaremos a remontar río Zafrilla arriba, con la intención de llegar al Rento de la Peraleja, habiendo al principio senda, pero luego hay que bajar al río que esta lleno de vegetación y eso sumado a que ya era tarde, hizo que desistiese.
Pero antes volvamos a ver esta cascada del Zafrilla que ya me conozco de otra vez, pero que nunca había visto con tanta agua.
Habiendo en unos de sus márgenes, y debido al tipo de toba, estas extrañas cuevas túneles.
A lo que deduzco que serían refugios de gancheros o para guardan los aperos. Aunque a ver si alguien nos puedo explicar el porqué de estos túneles.
Bajaré un poco río abajo para cruzarlo por una pasarela y ver la cascada desde el otro lado. Los túneles se ven a la derecha arriba.
Misma foto hecha, dos años antes, a principios de verano del mismo lugar, antes de pegarme un baño.
Vean la cantidad de agua que le trae el río Zafrilla, su primer gran afluente, al Cabriel. Como su nombre indica le viene a traer aguas de la sierra de Zafrilla rondando los 1600 y 1700 metros.
Con el cuadrado negro ubico donde vamos a dejar el coche, y con círculos os pongo la ubicación de las dos chorreras y la cascada del río Zafrilla.
Por último y para despedirme, dar las gracias a un amigo de Magia Serrana, Nacho Latorre, que fue quien me habló de la existencia de esas dos chorreras pegadas al Cabriel. También decir que dichas cascadas solo llevan agua en época fuerte de lluvias o deshielo, como ocurre en esta entrada.
¡¡Hasta la semana que viene!!
El amigo Mariano Lopez Marín, cronista e historiador de Salvacañete y de toda esa parte de la Serranía de Cuenca nos comenta: " Estas cascadas son conocidas en Salvacañete como Cascada de la Nogueruela y Cascada de La Peraleja.La primera casa del río es El Molino de la Herrería que fue también además de molino harinero' fábrica de luz para La Nogueruela; fabrica de hierro en los siglos XVIII y XIX y batán. Ahora es una casa de turismo rural preciosa y esta restaurada muy bien.Las otras de mas abajo son Las Casas del Río.Por alli pasaban las maderadas y los gancheros..Tuve una vecina que vivió allí y me contó sus vivencias.Las cuevas de los margenes eran refugio de gancheros y alguna vez para el ganado en caso de tormenta"
ResponderEliminarSi queréis ver la descripción del MOLINO DE LA HERRERÍA DE SALVACAÑETE que aparece más arriba en las fotos del amigo Toni Virtudes Segarra podéis verla en este artículo mío:
ResponderEliminarhttp://www.salvacanete.es/articulos/molinos-hidra%C3%BAlicos-harineros-en-salvaca%C3%B1ete-0
Saludos cordiales.
Mariano López Marín
Hola Mariano.
EliminarUn placer tenerte por estos pagos cibernéticos contándonos telúricas historias de estas bellas sierras.
Hola Toni.
ResponderEliminarMuy interesante esta entrada de una parte de la Serranía tan desconocida con parajes dignos de admirar, así como lo relacionado con el Molino de la Herrería, las cuevas y demás construcciones.
Coincido contigo en el disfrute de esos días de frío y hielo, tan añorados ya con el calor que se nos echa encima. Estaría pateando todo aquello un día si y otro también. Que pena no tener todo aquello un poquito más cerca, pero bueno, seguiremos haciendo el esfuerzo de vencer esa distancia.
Un abrazo.
Hola Andrés.
EliminarEncantado de tenerte siempre por aquí. Es que el buen serrano yo creo que ama el frío. Siempre lo digo que el frio se combate con abrigo pero el calor y las moscas llega un momento que no hay nada que hacer, más que pasar calamidades. Sé que estos parajes te cogen algo lejos de verdad, pero no pasa nada, pues aquí estoy yo para mostrároslo.
Hola Toni.
ResponderEliminarLos dos primeros saltos de agua son preciosos, y la tercera cascada, aparece fotografiada en el libro, ¿no?.
Veo que somos unos cuantos los que no nos gusta el calor, aunque ello no frene nuestra ansia de salir al monte.
Un abrazo.
Hola Dani.
EliminarBuen ojo, chicho! efectivamente la 3ª cascada viene en el libro. El buen montaraz campestre debe estar hecho a todos los climas, pero la verdad que cuanto antes se pase Julio y Agosto mejor. Jejejee..que brusco se puede llegar a ser!
Hola Toni
ResponderEliminarMuy chulas esas cascadas, tengo conocidos en Casas del Río y un día tengo que acercarme por allí para conocer esa zona, estuve apunto una vez y al final se quedo en nada, pero tengo que ir.
Un saludo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose.
EliminarAlgo me dijeron que los dueños que habían convertido la casa del río o Molino de la Herrería tenían un restaurante en Castellón. Yo estaba buscando información sobre esa casa rural para intentar pernoctar un finde pero no la encuentro en internet.
Venga animaros que no esta tan lejos!!
Un saludo.
Buenas tardes:Veo ahora tu blogg como me dijiste con las magnificas fotografías.Mi abuela paterna creció en el rento de la Pelareja con una de sus abuelas.Pero no disfrutaron de una vivienda comoda.Vivian en una cueva,quizas como las que aparecen en algunas de tus fotos.Un invierno muy duro cayò semejante nevada que desde Zafrilla salió un grupo de hombres a rescatarlas.Se habían quedado aisladas en el interior de la cueva.Y entonces no existían congeladores atiborrados de comida.Que tiempos mas duros.Saludos.Juan Mazcuñan
ResponderEliminarMuy bien trabajado el blog. Le estoy echando un vistazo a las rutas porque hace tiempo que quiero ir a la Serranía de Cuenca, y he estado a punto en un par de ocasiones.
ResponderEliminarCuando me decida a emprenderlo y tenga las rutas apropiadas, te pediré consejo.
Un saludo
http://elbarrigueta.blogspot.com.es/2014/09/valle-de-ordesa.html
Hola Angel.
ResponderEliminarNo lo dudes en preguntarme, ya que la Serranía es muy desconocica y poco masificada aún (gracias a Dios), siempre que nos salgamos fuera de los circuitos famosos (ciudad encantada, nac. del rìo Cuervo), y muchas rutas no están señaladas y siempre es buena ir con algo de información.
Ah...estuvimos en Ordesa este Agosto, que mi mujer no lo conocía y como siempre allí arriba es para flipar y alucinar.
Un saludo.
Un saludo.
Has sabido algo más sobre los túneles? Quizás las cuevas eran viviendas.
ResponderEliminarPor cierto, si tengo sangre de San Martín de Boniches,... tengo sangre serrana? Me gustaria ser serrana! Un abrazo
Hola Nekhbet z.
EliminarEntendemos que eran cuevas para cuando bajaban la madera poder guardar los aperos o incluso los gancheros para dormir.
San Martin de Boniches es sierra baja pura y dura. Hubo un terrible incendió que asolo todo su termino hace veinte años, y aquello va recobrando poco a poco su anterior aspecto.
Hasta otra.
Buenos dias:
ResponderEliminarAcabo de descubrir tu blog... y me ha encantado. En mi pueblo (Chinchilla de Monte Aragón en Albacete) cuevas como las que muestras en las fotos fueron usadas en los años 50-60 para cultivar champiñón, hoy en día están todas abandonadas...
Un saludo!
Hola Mercemc.
EliminarEncantado que te guste el blog. Cada lunes cuelgo una entrada nueva. Curioso lo de las cuevas para el champiñón. Aquí por la Serranía solían ser cuevas refugios para los gancheros en sus periplos fluviales.