LA SIERRA DE SANTA CRUZ EN BUENDIA Y EL VALLE FLUVIAL DE BOLARQUE


Del conquense y moruno río Guadiela todos habréis oído hablar, principalmente de su largo tramo por la Serranía, donde le viene a echar sus aguas el río Cuervo, y más adelante, el río Escabas. En su serrano discurrir talla y sublima parajes naturales como son la Hoz de Beteta o la Hoz de Tragavivos. Pero lo que ya mucha gente desconoce que antes de fenecer y echar sus aguas al Tajo en el Pantano de Bolarque, crea otra hoz, en este caso valle fluvial de vistas y proporciones espectaculares.

Justo donde está la presa del pantano de Buendía comienza dicho valle fluvial. El lugar fue el idóneo para colocar la presa. A partir de ahí, el poder erosionador del Guadiela abrió en dos el macizo montañoso de la Sierra de Altomira, dividiéndola en dos serrezuelas; al oeste la alargada Sierra de Enmedio, vista en la entrada de la semana pasada, y al este la alargada Sierra de Santa Cruz, dos cordales montañosos de morfología parecida y con muchas cosas curiosas en su haber.

Si la semana pasada vimos la Sierra de Enmedio, aunque la cacería de turno nos impidió caminarla por la parte alta, y nuestras vistas eran hacia la Sierra de Santa Cruz, hoy va a ser al revés, pues caminaremos la Sierra de Santa Cruz y nuestras vistas principalmente se irán a la Sierra de Enmedio.




No obstante, la Sierra de Santa Cruz tiene un desnivel nada desdeñable para lo que suelen ser los desniveles en Cuenca, ya que desde el río Guadiela hasta el vértice de San Cristóbal estamos hablando de 430 metros de desnivel en apenas 800 metros de longitud. Del otro lado de la Sierra, el que da al pueblo de Buendía y por donde subiremos, el desnivel es algo menos. Mi plan era desde Buendía subir a lo alto del cordal y ver si se podía bajar al Guadiela pero ese desnivel hace que no encontrara bajada ninguna al río. La única manera es irse mucho en dirección sur, dirección Jabalera, para encontrar laderas más suaves y bajar por una empinada pista forestal que si llega a esa parte baja, cerca del río, pero eso es para el coche todoterreno y otra ocasión futura.

Doy comienzo a la ruta, saliendo del coche, un poco más delante de Buendía, y apretándome la cuestecita hasta subir a la parte alta por un carril infame. Lo mejor sería llamarlo pedrera en forma de carril porque ojo, por ahí no van ni los más avezados todoterrenos.


Salgo del coche, y al fondo podemos ver este lado de la Sierra de Santa Cruz.

Con el zoom entre jirones de bruma mañanera, podemos atisbar como el carril serpentea para subir a la parte alta.

El carril se pone bravo desde el principio, y esa es la mejor manera de entonarse por la mañana.

He dicho carril, pero realmente es el infame carril.


Llegamos al primer colladete, donde vemos el siguiente más arriba.

Una vez puestos en el 2º collado, vemos el final con la parte alta que estaría a la izquierda.

Casi en toda la subida hemos tenido el pantano de Buendía a la vista.

La niebla mañanera entra al valle fluvial del Guadiela, pasando por encima de donde está la presa.

Llegamos a la parte alta donde asoma al otro lado el valle fluvial que forma el río Guadiela.

Nos acercamos más hacia el otro lado porque nos llama la atención la erosión de esa ladera.

Estoy flipando con las formas geológicas tan curiosas que se ven.

Eso si miramos para acá, por que si lo hacemos hacia el otro lado del valle, las formas siguen siendo harto peculiares.

Sobre todo esta formación. Luego os la enseñaré desde enfrente.

Una vez arriba. Solo queda deleitarnos con las vistas, y seguir la dirección sur de la pista forestal, ya de mejor traza, que va por todo el cordal montañoso, pasando por el vértice geodésico de San Cristóbal, punto más alto de esta serrezuela.

Allí tienen mi próximo objetivo, el Alto de San Cristóbal (1066 metros)

Al que llegaremos fácilmente por el camino que va por lo alto de la sierra de Santa Cruz. 

Cuando llevamos un rato de camino, echamos la vista atrás para ver la boina puesta encima de la presa, entre el pantano y el valle fluvial.

Por este punto, me salgo del camino para acercarme a los bordes, ya que aquello se espectacular.

Guuuauu, la vista que se me presenta me acelera las pulsaciones.

Como dije antes, ahí tenéis esa peculiar forma geológica, a la que bauticé como la Herradura.

A todas luces es una erosión kárstica típica serrana pero estoy asombrado de verla tan vertical y en esa formación.

Esperen, que aún no acaba el festival; miren que vista hacia el otro lado.

Nos acercamos para ver ese meandro de Bolarque y la Cruz de los Borrachos encima.

La verticalidad de estos precipicios y laderas impone lo suyo.

Otro vistazo atrás, para ver la parte donde empiezan los precipicios.

Aunque no los vimos, los Gyp Fulvus gustan de estos lugares. Vaya a donde vaya por Cuenca encuentro buitres, y eso me alegra de veras.

Más allá vemos el pueblo guadalajareño de Sayatón.

1ª Panorámica del valle fluvial del Guadiela. Pinchen para verla en grande.

2ª Panorámica del valle fluvial del Guadiela.

Por ahí va la pista forestal que va a la ermita y que transitamos la semana pasada.

Llegamos al vértice de San Cristóbal (1066 m.) con el pueblo de Buendía al fondo.

Vamos a seguir más para ver si encuentro alguna bajada por la derecha que me acerque a Bolarque.

Los ojos se me van a lo que se ve abajo.


Y a las rocas que se ven guardando equilibrios varios.

Hay tramos que el carril se acerca al borde y se pone interesante.

En cuanto a encontrar bajada por estos bordes......

No soy nada optimista.

Vistazo atrás para ver el valle fluvial y la Herradura.




Como no pude encontrar paso para bajar al Guadiela, alargue la ruta por esa pista hasta que decidí volverme; aunque haciéndola circular y volviendo por una senda que bajaba al pueblo de manera directa y que encontré mirando en los mapas, y que en muchos tramos está desaparecida pero debiera utilizarse en el pasado por los hombres y  mujeres de Buendía para subir a labrar la parte alta del cordal, incluso para bajar al Guadiela en el entorno de la ermita de la Virgen de los Desamparados por algún camino ancestral hoy en día desaparecido.

 Vean el carril a la izquierda y los bordes rocosos no ceden en altura y verticalidad.

Más allá de la curva de Bolarque se ve este tapiz tan chulo que forma la Sierra de Altomira y por abajo el valle hoz que forma el río de Jabalera, afluente del Guadiela.

No os he hablado de la Torre maligna del Doctor No, donde se está preparando una bomba para acabar con la humanidad. Fuera coñas, no será la única construcción visualmente horrible que veamos.

Cambio mil veces antes la Cruz de los Borrachos que la Torre maligna del Doctor No.

Y por supuesto, uno de los santos y señas del pueblo de Buendía, la Ermita de Ntra. Sra. de los Desamparados.

La Base Militar de Torrejón de Ardoz está en dirección norte, y eso se nota por estos F-18 o 25 o 63. La verdad que no tengo muchas idea de artefactos militares actuales, soy más de haz el amor y no la guerra.

  Un autorretrato con estos paisajes.

En las laderas de abajo se ven carriles que algunos se mantienen umbrosos y con la escarcha aún intacta.

Desde aquí tenemos la Sierra de Madrid  bien nítida con algo de nieve en sus cumbres.

Más oriental sale esa cima que será de la Sierra de Ayllón, y que no me atrevo a decir si es el Pico del Lobo, El Ocejón o algún otro.

Es hora de volver, viendo que al final me aparece a la izquierda la Hoz de Jabalera y en lo alto el cordal de la Sierra de Altomira.

En este punto por fin nos aparece la curva de Bolarque, donde quería llegar la semana pasada antes que los cazadores me impidieran llegar.

El otro edificio horroroso que aparece es esa construcción a medio hacer, que aunque no consigo encontrar información en internet, tiene pinta de ser como el Algarrobico de Cabo de Gata o el Hotel del Molino de San Pedro en Teruel, aberraciones urbanísticas que la Justicia ha paralizado. La Presa de Bolarque estaría a la derecha de la foto. Jose Antonio en los comentarios del blog nos indica que a ese hotel en construcción se le llama la Marota, y lo empezó a construir Teodulfo Lagunero, al que llamaban el comunista rico, un hombre con un vida curiosa.

Volviendo me sale esta amplia vista del valle fluvial que tanto nos ha gustado.

También me despido de la Herradura.

Porque dejaré lo alto del cordal de la sierra, ya que el mapa nos dice que por aquí baja un senda antigua.

Hay que tener un poco de pericia senderista para ir descubriéndola, ya que la vegetación se la está comiendo.

Eso si, pronto y de manera bastante directa, nos pone cerca del pueblo de Buendía y las características tierras badlands alcarreñas detrás.

Toca tercios de rica cerveza en el pueblo, admirando algunos de los tramos de su bella muralla, que antaño rodeaba esta villa conquense con tanta historia.

Plano con la ruta realizada.

¡Hasta la próxima!

Comentarios

  1. Super chulo el reportaje. Enhorabuena como siempre. Los cazas estoy seguro que son Eurofighter. Un saludo Toni

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    1. Gracias Javi a ti por leerme. De los aviones como si me hablas en chino, no entiendo ni papa. Eurofighter, me suena a videojuego, jajaja

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  2. Toni, no es Eurofighter jajajaja Perdona.

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  3. Gran reportaje y fotos Toni, como todos los que haces, milimetrados al detalle, envidia sana, el pico que te genera dudas es el Ocejón, muy interesante y bonita esta zona de Buendía, un lujo poder verla a traves de estas magníficas fotos.

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    1. Hola Jose Luis.

      Muchas gracias por tu comentario. Como he contado en estas dos entradas sobre esta comarca, zona muy recomendable de visitar sea en plan más turista o senderista.

      Yo tambien pensaba al principio por el Ocejón pero tambien está cerca el Pico del Lobo que es otro dosmil (o casi) y ya me entraron dudas. Gracias por el dato.

      Un saludo.

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  4. El Pico del Lobo visto desde nuestra zona está integrado en la sierra de Ayllón y no destaca tanto como el Ocejón que nos pilla mas cercano y aislado, los dos sobrepasan los 2000m, incluso el Lobo es unos 224m mas alto y techo de Castilla la Mancha, aunque al ser su cumbre divisoria entre Guadalajara y Segovia, se considera techo comunitario al Pico las Cabras, 2083m en la albaceteña sierra de Taibilla...

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  5. La herradura parece un desprendimiento masivo de roca caliza asentada sobre algún sustrato débil, no? el otro día viendo el reportaje sobre la historia de la catástrofe de la presa de Vajon, describían algo muy parecido, roca caliza asentada sobre una fina capa de arcilla.

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    1. Hola Jose Antonio.

      Interesante tu teoría del desprendimiento. Por un lado, parece lógico viendo la verticalidad de la ladera, aunque por otro, en el caso de suceder aquello hace cientos (o miles) de años en el cauce del río, hoy embalse debiera haber grandes bloques de piedras, y sobre todo mucha cantidad. Sería increíble saber la teoría exacta de como se formo.

      Un saludo.

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  6. Por cierto, el horrible edificio a medio terminar en al náutico de Bolarque es el Marota, uno de los hoteles faraónicos que proyectó Teodulfo Lagunero en la zona y que se quedaron abandonados. La historía de Teodulfo Lagunero es curiosa.

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    1. Me he ido rápidamente a internet a investigar la vida del tal Teodulfo Lagunero y si es muy curiosa. Muchas gracias por los datos que me das, y por el nombre del Hotel de la Marota. Luego lo cambio en el blog, mencionándote.

      Un saludo.

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  7. Hola Toni,

    Que pasada de vistas que nos has mostrado del valle del Guadiela, si es que tus rutas siempre nos muestran rincones espectaculares.

    Que curiosas esas formaciones ennlas laderas, y sobretodo la Herradura, parece como si alguien hubiera arrancado un trozo y lo hubiera limado, una pasada.

    Vaya tela con el carril, cualquiera se atreve a meter el coche por allí...

    Salud, vistas espectaculares y carriles moratles!!!

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  8. Hola David.

    Es que esa formación es muy extraña, porque es válido pensar que de la verticalidad de la ladera, toda las rocas que hubiera dentro de la herradura se hubieran deslizado, cayéndose al río pero entonces debiera haber mucho caos de rocas en el agua y no es así. ¿Dónde están todas esas rocas de haberse caído para abajo?

    Esos carriles infames nos vienen muy bien a los senderistas porque nos permiten subir por una cuesta sin tener que estar además haciendo trochemoche, que siempre es más duro.

    Salud y erosiones extrañas!!

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  9. Hola Toni.

    ¿F-18? ¿F-16?, yo más bien creo que eran dos John Deere con doble cigüeñal y transmisión por cardán jajaja.
    Fuera de coñas, el topónimo del pueblo hizo honor al mismo y te salió un día esplendido para disfrutar de todas esas vistas, tan nítido estaba el día que pudiste ver hasta la Sierra de Guadarrama y la imponente silueta del Ocejón (nada más ver la foto no he dudado ni un momento de que se trataba del gigante guadajalareño). Pero lo mejor, a nivel panorámico, de la ruta son esas impresionantes vistas a todas esas curiosas formaciones erosionadas de la ladera que tuviste en frente. Debió ser una gozada caminar con esas vistas en todo momento.
    Esta entrada se complementa muy bien con la de la semana pasada, en la que veíamos las cumbres a ras de pantanos, y en la de la semana ha sido al contrario. Un acierto por tu parte publicarlas de forma consecutiva.
    Me voy de cabeza a indagar en la vida de ese tal Teodulfo (menudo nombrecito)...

    Un abrazo.

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    1. Hola Dani.

      Jajaja, los don John Deere. Si ya me han dicho por face también que es el Ocejón.

      Me quede con las ganas de encontrar una bajada y poder bajar por esas laderas, lo que habría sumado más dureza a la ruta pero aún así estuvo muy bien y me gustó mucho. No tardaré en volver a seguir investigando aquello.

      ¡Ahí le has dado amigo!, ya que no suelo repetir consecutivamente rutas del mismo lugar o paraje, siempre suelo dejar meses de por medio antes de volver al mismo sitio pero en esta ocasión tenía claro desde el principio que las iba a publicar consecutivas pues como bien dices quería enseñar estas sierras a ras de agua/suelo y luego desde las alturas.

      El tal Teodulfo, el comunista constructor millonario debe de ser (veo que está vivo aún) de cuidado. Eso de meter hotelazos gigantes en lugares tan chulos como este de Bolarque, saltándose la normativa.
      Me llama también que fue el que le compró la peluca a Carrillo y lo paso clandestinamente a España durante el franquismo.

      Un abrazo.

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  10. Hola Toni.

    Impresionante. Todo un lujo el habernos mostrado el ímpetu geológico de estas sierras y este Guadiela tan sorprendente... con despropósitos urbanísticos incluídos. Ya se ve que el desnivel por la infame pista se las traía, pero debiste disfrutar a tope recorriendo todo ese cordal en un día de esos invernales que apetece estar por ahí.
    Si no me equivoco, más allá de la torre maligna del Doctor No parece vislumbrarse, al lado del río Tajo, el poblado y la central nuclear José Cabrera ya sin la cúpula roja.

    Un abrazo.

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  11. Hola Andrés.

    Todo un descubrimiento esas parte altas de las sierras de Bolarque, donde seguro que volveré más adelante para conocer más rincones.
    De hecho, me llama un plan que a priori parece un poco loco que es subir por esa ladera de la herradura e investigar esas erosiones in situ.

    No sabía que había un central nuclear por allí, aparte de la de Trillo. También está por ahí donde empieza el trasvase, aunque todos estas construcciones más allá no me interesan la verdad ;-)

    Un abrazo.

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