LA SENDA MINERA DE URDÓN A TRESVISO EN PICOS DE EUROPA

 

La otra ruta que hicimos en esta semana cantábrica cambia completamente de escenario. Muchas veces la magia de esta parte del norte de España viene dada por la cercanía de esas costas que vimos en la entrada anterior con la verde y rocosa alta montaña que atesora la cordillera cantábrica, y más en concreto, los Picos de Europa. Hay tanta ruta y tanto paraje a apenas media hora en coche desde la costa que pueden pensar que tuvimos que devanarnos los sesos eligiendo una, pero no fue así. La ruta estaba escogida ya desde hace 16 años. Sí, sí, están leyendo bien.

A los dos años de empezar Maru y yo nuestra relación en unas de esas vacaciones por el norte de turistas (nuestras rutas conjuntas solían ser más paseos largos) llegamos con el coche a un lugar. -Debo recordar que Maru, por aquel entonces, no era senderista, y yo lo era mucho menos que ahora y, además, muy en mi onda, es decir, a lo mío y en soledad. Recuerdo tambien esos tiempos porque la comida de mis rutas eran tremendas, por ejemplo, un costillar de cerdo a la barbacoa o una hamburguesa con beicon y queso; todo bien metido en tupper grandes que me ocupaban un 1/4 de mochila. Imaginense mover el cuerpo cuesta arriba despues de haberse comido eso. En fín, otros tiempos, otras costumbres-.  

Dicho lugar se encuentra en la carretera del Desfiladero de la Hermida, es decir la entrada natural a la parte cántabra de Picos de Europa. Vimos que allí, en el poco espacio llano que queda, había unas casas de un caserío llamado Urdón. Luego vimos que aquello tenía relación con una central hidroeléctrica que hay en ese angosto y espectacular cañón. Aparcamos el coche, y nos dimos un paseo hasta la Central, impactados por el ciclópeo tamaño de las paredes de todo lo que nos rodeaba. 


Los paneles nos hablaban de una ruta minera que se hizo ex profeso en -¡ojo!- 1866, para bajar el mineral de zinc del pueblo de Tresviso a 940 metros de altitud hasta Urdon dentro del desfiladero de la Hermida a 80 metros de altitud. Las fotos de la zigzagueante senda eran espectaculares y se nos quedaron grabadas, pero ni por asomo se nos ocurrió ponernos a subir esa burrada de metros que se intuían. Comentar que hará unos diez años hicimos otro viaje ya más senderista a esta zona de Picos cántabra con nuestros chicos, Marcos y Nacho, pero no quise meterlos en esa ruta de Urdón por si su dureza se les atragantaba y no lo pasaban bien. Hay que ser cautos en el tema rutas en la montaña cuando empiezas a llevar a ninos o preadolescentes.

                

               

Esta es la foto del panel de la senda minera. En aquel entonces nos echó para atras, ahora la subiria todos los días, como parte de mi entrenamiento deportivo.


Por lo que, 16 después de aquella primera vez, con el senderismo bien asimilado como forma de vida, con muchos kilómetros de monte en nuestras piernas, muchos desniveles hacia arriba y hacia abajo, bellos paisajes en nuestras retinas e incontables experiencias maravillosas -y algunas no tanto- nos presentamos Maru y yo con nuestra Gina, bien pronto en Urdón, ya que si no se madruga no encontrarás sitios para aparcar, ante los pocos espacios que hay en el Desfiladero de la Hermida para dejar el coche y hacer la ruta que veréis a continuación.

                    Estamos en Urdón, y una vez aparcado entramos en el cañon que se crea.


                           El paseo por ese carril viene a acabar ahí, en la Central Hidroeléctrica.


                              Despues tenemos el río Urdón y su bello cañón desfiladero.

                                        Y una senda muy bien perfilada por su lado izquierdo.

                                                       Que paulatinamente va subiendo.

Todo este primer tramo es muy sencillo, accesible y de gran belleza al ir viendo como el río va creando saltos y pozas.

                       Estos hayedos umbrosos completamente verticales llaman nuestra atención.

Al igual que la senda entre avellanos, que empieza a picar para arriba, tal y como avisan los paneles.
                                  Por esta espectacular canal subiremos haciendo lazadas.

                                        Aquí vista hacia abajo desde la mitad de la subida.

                          La gente que subía nos viene muy bien para calibrar este lugar.

La subida parece que nos lleva al fondo, al final de esta canal, pero en Picos nada es lo que parece. A la izquierda de Maru, en ese parte con vegetación torcerá la senda y saldrá de esta canal.

Un inciso para contaros que allí, en la cuesta, me encontré estas gafas. ¡Por fin me encuentro unas, y no soy yo el que las pierde!


Despues de salir de la canal, la senda zigzaguea por este lateral. En este punto, enfrente nuestro vimos algo curioso.

                        Al fondo del todo, dónde se ve esa especie de repisa rocosa en diagonal.

En un lugar solo apto para cabras montesas vimos ese muro de piedras. Allí se había llegado por raro que nos pareciera. Al final de la entrada cuento la investigación a posteriori de estos restos.

Nos parece lógico que la brutal senda minera que llevamos necesitó de la ayuda de la dinamita para hacerse.

                           La senda vuelve a ponerse sobre el barranco del río Urdón.

         Además, recibimos al solecito que siempre es bienvenido a estas horas mañaneras.

                Un gustazo ver como vencieron a la inclinación haciendo la senda transitable.

           Las partes altas soleadas son un espectáculo rocoso de primer orden, made in Picos.

                      Vistazo hacia atrás para ver como vamos saliendo a la parte alta.

A nuestra izquierda el tremendo desfiladero del río Urdón, el cual dejamos de verlo casi desde el principio de la cuesta

De pronto, se nos abre la siguiente parte de la subida, donde al fondo, en el centro de la foto..


Se presenta una ladera bastante vertical donde el camino zigzaguea todo lo posible para hacerlo transitable.

                                                 Nuestro avance sigue fiel a la senda con vistas...

A la parte alta, donde el Urdón es un arroyete de pastizal antes de precipitarse y crear el barranco.

                                           Este tramo es muy cómodo con tanta lazada.

Que cuando cogemos altura y las vamos dejando atrás, la ladera coge este aspecto y vemos gente subir.


                                                  Miren que muracos para sujetar el camino.

                                 Otra perspectiva trasera distinta de lo que llevamos subido.


                        Vamos mirando el movil de vez en cuando para ver los topónimos.

           
                Nos topamos con algunas bocas de galerías de las antiguas minas.


Después de subir el tramo vertical de las últimas lazadas, se nos presenta esa hermosura de canal herbosa por donde hay que subir.

Estamos en lo que se llaman las Invernales de Prías, refiriendose a estas construcciones destinadas a los rebaños.

                                 Seguimos con las lazadas de lado a lado de la canal.

          Según nuestros cálculos, el pueblo deber estar detras de la parte alta de la canal.

                 Aunque al llegar a la parte alta, a nuestra izquierda, aparece este mirador.

                                          Sitio estupendo para ver estas vistas.

                       Y deleitarnos con estos paneles que tanto nos gustan a los trotasendas.

                                               Despues, ya nos queda el comodo camino

                                            Con sus fuentes tan curiosas como esta.


                                                        Al bucólico pueblo de Tresviso.

                          Entramos en él con varias ideas rondándonos la cabeza.


Tresviso está a 938 metros, y encima suyo se levanta imponente el cresterío de la Sierra Cocón con el Cuetu Cerralosa marcando los 1565 metros, y haciendo de divisoria entre el valle de Tresviso y el Valle del pueblo de San Estebán.

    Un de los planes a realizar en este pueblo era comprar el producto por el cuál es conocido...


Y que para dos enfermos de los quesos como nosotros es una completa maravilla. Foto cogida de internet.

Se nos van los ojos a todas las posibilidades senderistas que hay entre Bejes, Tresviso y San Esteban, y eso que aún no hemos entrado propiamente en lo que es el macizo calcáreo de Picos de alturas sobre la cota 2000 metros.

La otra idea es tomarnos un maravilloso terciete con unos ricos glubins. Solo uno que aún nos quedaba la bajada.

                  Bajada que no tardamos en acometer y dónde os voy a contar un par de cosas.

     Justo enfrente de Maru, y al otro lado del Desfiladero del Urdón va el tremendo canal que baja el agua a la Central Hidroelectrica: el Canal de Reñinuevo.

    Os voy a acercar la vista. Fijénse que a la derecha de la foto se ve el canal entrar en la roca.

Más zoom. Despues de esa caseta de la izquierda, caerían totalmente verticales los tubos a la Central.

Resulta que por ese Canal llamado de Reñinuevo se ha podido transitar, aunque se ve no apto para gente con vértigo.

Os voy a compartir tres fotos cogidas del blog www.javibrechas.blogspot.com  Dar las gracias de antemano.

                                      ¡Ojo!, por donde sube/baja la senda de este canal.

                 Entiendo que esta es la caseta asomada al abismo que vimos una fotos antes. 


Foto cogida del bar del pueblo donde se ve el tramo del canal más famoso, el Corredor de Matallana. No sé vosotros, pero a mí me da algo de yuyu ver tanta gente ahí sentada....



Leo que en 2021 Repsol tiró abajo este Corredor, me imagino que por su peligrosidad, cargándose el sendero entero. Es una pena que no se reconstruya con seguridad para poner en alza el valor senderista de este recurso, ya que quedaría una ruta sencillamente brutal. Subida por el canal de Reñinuevo y bajada por el camino minero.

El otro asunto trata de recordar la foto del principio de la entrada donde Maru y yo vimos un murete hecho adrede en lo que parecía un lugar muy vertical e inaccesible. Pues resulta que investigando parece ser que por allí va otra senda (por llamarla de alguna manera). 

Antes de eso, debemos hablar de los pastores trevisanos y su querencia por sus cabras y por los lugares vertiginosos. No sé si seria coetáneo al camino minero o anterior pero se le conoce como el Jorau y el Canal de TrasdelJorau. Un camino completamente desaconsejable para quien no tenga mucha experiencia montañera. Os paso el enlace de este blog donde se ve dicha ruta y os pongo un par de fotos, dando las gracias de antemano a sus autores.

                Como ven, en gran parte no hay senda sino monte a traves y hacia arriba.

El autor del blog con los puntos rojos va indicando por donde subieron. Uffff realmente tremendo.


Seguimos bajando viendo la senda de la pedrera canal por donde subimos al principio y en ella vemos a......

Las cabras que han hecho que los trevisanos a lo largo de los años hayan improvisado caminos tan locos como el del Jorau. Aunque para locos, hay otro camino,allí en el cañon del Urdón, que ver sus fotos es hasta mareante, entrandonos la certeza que estos pastores de Tresviso eran más escaladores que pastores. Se llama el Tombu Robru Ver Aquí Dar las gracias al blog www.pucaviaia.blogspot.com
 
                                    Llegamos al final con un muy buen sabor de boca

Esa misma boca , que tras un tercio en un bar de Panes, se relame viendo el rico picoteo que preparamos en un merendero cercano.

Otro día por Ribadesella intentamos comernos una fabes en un restaurante, pero ante lo lleno que estaban todos los sitios, nos buscamos otro plan. Con la furgo no hay problema, en una tienda de barrio compramos unas fabes con almejas de latas gourmet, unos tomatillos y atun, y tan rebien. ¡Puxa Asturies y Viva Cantabria!

                                                    ¡Hasta la próxima!

Comentarios

Entradas populares