POZOS, POCILLOS Y LAGUNILLAS DE TIERRA MUERTA (II)

 

El Monumento Natural de Palancares y Tierra Muerta tiene una superficie de 18 436 ha. De las que 12 795 ha. pertenecen al término de Cuenca ciudad y 5 248 ha. al término de La Cierva. El término del pueblo de Palomera entra en el Monumento Natural con unas testimoniales 392 ha. (las de mi querida Hoz del Buey concretamente).

Con esto vengo a decir, que la superficie real de Tierra Muerta y Palancares es mucho mayor de esas 18 436 ha., ya que parte de los términos de Buenache, Palomera, Beamud, Cañada del Hoyo y más parte del de Cuenca entrarían en lo que se considera el paisaje físico y paisajístico de esta comarca.

Si es cierto que todos estos núcleos urbanos sí se consideran que están fuera de la comarca, pero parte de sus términos no, y para los escasos habitantes de esta comarca, Tierra Muerta y Palancares sería todo este monte sediento, bello y solitario, apartado de la civilización.

Aunque hable del Monumento Natural, para estas entradas de los pozos y lagunillas abarcaré toda la comarca como si fuera unidad, obviando la extensión legal de esta figura jurídica de creación en el año 2001.

 


Se considera que el limite físico entre la Muela de Palancares y la Paramera de Tierra Muerta es, al norte el barranco del Arroyo de la Rambla, lo que se considera la cabecera del río Huécar, y todo el sureste que estaría delimitado por el Arroyo de la Rambla Verde (tributario del río Guadazaón). Que se nombren arroyos no significa que haya agua, ya que suelen llevar algo de agua solamente en los inviernos generosos (algo más el de la Rambla del Huécar).

La muela de Palancares es de menor extensión que Tierra Muerta. Verán que casi todos los pozos están en Tierra Muerta. La Muela de Palancares es un fantástico y extenso pinar, mezclado con sabinas, aunque en menor número y medida, y con el espectacular fenómeno de las Torcas en su interior; además de ese rincón tan chulo que lo conforman las 3 Hoces (Buey, Chiquilla y San Miguel)

Y la Paramera de Tierra Muerta, en contraposición a Palancares, es mucho más grande, con mayor proporción de sabinas que de pinos. Roquedales calcáreos, tierras "badlands" rojizas, suelos que en verano se cuartean, paramos como más áridos; todo ello hace que las sabinas prosperen tan bien como lo hacen y hacen que el apelativo de Tierra Muerta se empiece a entender.

No es fácil viendo fotos de hacerte una idea de lo que es Tierra Muerta; la mejor manera, como sucede en estos casos, es andar mucho por sus eriales, por sus roquedales, por sus retorcidos sabinares. Es cierto que todo está lleno de vida, pero algo hay que se siente y se ve, que hace comprender la bella crudeza de estos páramos. Ya no solo es la falta de población y la falta de agua, con toda la sequedad veraniega que trasmite, sino la soledad, la virginidad y lo poco alterada que se nota esta naturaleza.


1) Pozo Coronado y su Lagunilla (al este del termino de Buenache, en el límite): Este es curioso porque lo que hay es la Casa del Pozo Coronado, una de esas pocas casas que se habitaron a lo largo de las décadas en Tierra Muerta. Una inspección minuciosa de la casa y alrededores, nos descubre que adosado a la casa y bajo una plancha de cemento hay un depósito de agua, que yo creo que en origen fue un pozo, quizás algo más reciente en el tiempo. 

¿Pero entonces, no es este el Pozo Coronado? Pues posiblemente sí, pero es uno de ellos, ya que como 200 metros más al oeste están los otros dos Pozos Coronados, con su pequeña lagunilla creada al efecto. Uno de los pozos se mantiene auténtico, con su capa de palos tapándolo, y el otro, seguramente a raíz de la creación de la lagunilla, se transformó en un depósito.

          A un lado de la carretera que va del cruce de TM hacia los Palancares tenemos esto.


                   La Casa del Pozo Coronado. Vemos el propio nombre habla de pozo....

Adosada a la casa está esta plancha de piedras y cemento que guarda un depósito de agua, seguramente el pozo original que le da nombre a la casa.


                                          También se ve medio ruinoso lo que fue un horno.


Aquel día me cayó un pedrisco tremendo que me obligó a buscar cobijo debajo de una sabina.

Busquemos ahora lo primero esto, la Lagunilla de Pozo Coronado.

Miramos a los alrededores y ahí aparece uno de ellos.

Menuda maravilla. Esa construcción denota que no es tan antiguo, o a lo mejor, sobre el viejo pozo le construyeron con ladrillo y cemento esa estructura.

Me asomo y lo veo con agua. Entre la filomena de hace un par de meses y lo que estaba lloviendo me lo imaginaba lleno.

Lo que veo que es bastante profundo y enigmático con esa agua tan clarita.

Por ahí tirado está el último sistema utilizado a lo largo de los años para sacar agua.



Pozo y lagunilla, pero en el mapa viene otro pozo más ¿lo encontraré?

Al otro lado de la lagunilla, adosado al terraplén me encuentro esta plancha de rocas y cemento.

Esta rama oculta lo que se adivina como la entrada a este depósito.

Aquí debiera estar el otro pozo, reconvertido en este depósito.

Una cosa usual por TM es esto. Yo creo que son corralillos itinerantes y hechos en el mismo momento con ramas secas de sabina para guardar pequeños rebaños de ovejas.


2) Fuente de Pozorruz y Lagunilla del Barranco Calderón (dentro del término de Buenache, al este): Como ven, el nombre es fuente y no pozo. Puede que en su origen fuera pozo (de hecho, en el mapa antiguo sale como pozo), pero por el hecho de ser una bonita pradera, lugar idóneo para que el ganado beba y las personas disfruten del lugar, se transformó en fuente; incluso se hizo un pequeño deposito circular de agua para los incendios. 

Como unos 300 metros vaguada arriba, en la cabecera, encontramos la clásica lagunilla o navajo con los restos de unas viejas corralizas. Todo ello a unos pocos cientos de metros de la torreta forestal del Alto de Pozorruz, una loma algo más alta que el resto de Tierra Muerta, ideal para vigilar tanta extensión de tierra en cualquier dirección.

La fuente hecha con este abrevadero de hormigón está seca, seguramente con la vena obstruida.

                                                         El agua viene de este depósito.


                                                           Seguramente el pozo original.


200 o 300 metros vaguada arriba nos topamos con la Lagunilla Calderón, con un tamaño bastante ingente, gracias a los temporales del invierno.

   ¡Coño! si aquello parece otra de esas estructuras como la de la Lagunilla de los Tragaderos.


La misma estructura, y, curiosamente, la misma ubicación en el lateral izquierdo, que la otra.


  Estuve tiempo sin saber el porqué de esta extraña construcción y fue mi cuñado, experto en temas medioambientales, quien me dijo que debían ser estructuras para poder sacar agua en caso de necesitarla, generalmente un camión especializado en esta tarea.



                                               Vértice y torreta de Pozorruz (1423 metros)


3) Pozo Borrucho (X) (Al sur del término de Beamud, fuera del él): Pozo que no encontré, ya que su ubicación en el mapa era extraña al estar en una loma más alta que las vaguadas o valles que la circundan, supuestamente más alejada del acuífero subterráneo. En su lugar, encontré una especie de torca asimétrica muy rocosa, que luego en la lectura del libro de la Cueva del Boquerón veo que la llaman la Torca del Pozo Borrucho, a la que por supuesto descendieron para ver si había continuación espeleológica.

Aunque el fenómeno Torcas en su máximo apogeo está en los Palancares, en Tierra Muerta hay algunas no muy grandes como está que ven en la foto.

                     Otra instantánea usual al recorrer los carriles y carreteras de TM es esta.


4) Fuente y Lagunilla del Cerro del Toro (al este de la Casa Prado de los Esquiladores): Aquí me lleve una sorpresa, pues dicha fuente existe todavía y nunca ha sido (ni es) un pozo, sino un pequeño manantial que nace debajo de una losa rocosa. Cuando la vi en invierno si manaba algo de agua, pero según avance el año y llueva menos, este manantial se secará con seguridad. 

A apenas diez metros esta la pequeña lagunilla, donde lo que llama la atención es un refugio (cerrado) propiedad de la Junta y que ahora está en uso privativo para los pastores, el refugio aprisco del Cerro del Toro. No lo sé con seguridad, pero me imagino que, sobre las viejas ruinas de una vieja construcción pastoril, se hizo este refugio nuevecito, y que da mucha envidia que esté cerrado y no se pueda disfrutar por los senderistas de bien.

                                 Llegamos al peculiar y bello paraje del Cerro del Toro.


                                                     Con su lagunilla de turno asomar.


Desde otra perspectiva. Decir que la mayor parte de las lagunillas se suelen secar en verano y en ellas reside una comunidades acuáticas algales del género Chara, protegidas por ley, y que son similares al musgo, como la Riella notarisii.


             Busco por los alrededores la fuente o pozo y me encuentro esto primeramente....


     Con esta estructura ruinosa que nos dice que tuvo que ser antaño un buen punto de agua.


                   Y la sorpresa es esta: es un manantial auténtico y, hoy en día, muy exiguo.


Salía agua por ambos lados, y recuerdo, por supuesto, beber unos buenos tragos de este manantial fuente, cosa muy poco usual en TM.


                                           La otra sorpresa que me encontré fue esto.


Refugio nuevecito y de uso privativo. ¡Lástima! por que si no,  me hubiera venido con Maru a pasar una noche.


Al lado se encuentra esta extraña construcción. Mi amigo Fernando "Oso" tiene la teoría que sea algo que se hiciera para cetrería.


5) La Fuente y Casa de la Sabina (al oeste del término de Beamud): aquí lo primero que destaca es otra de esas casas que fueron habitadas en el pasado. Como tal lugar, debiera haber agua para la subsistencia, y justo debajo de la casa, ya dentro del valle vaguada, se encuentra la Fuente de la Sabina, conocida para los que gustamos tanto de la Serranía.

Lo primero que vemos es una fuente echando agua en unos hermosos gamellones de madera con sus prados alrededor, pero si buscamos como 10 metros detrás de la fuente vemos que el agua viene de un antiquísimo pozo, que, al estar hecho en la ladera, aprovecharon la pendiente para en la parte inferior sacar un conducto que llevará el agua a la Fuente. Me queda claro que en su origen fue pozo, y, ante la presencia de gente habitando en la casa, construyeron también la fuente.

La Casa de la Sabina en la parte alta, ya que detrás a la derecha se intuye un valle donde abajo  está......


                                          La Fuente de la sabina con sus gamellones típicos.


                  Detrás de la fuente, vemos que el agua viene desde la mitad de la ladera.


    Mas en concreto, desde este punto, donde el abandono es notorio. ¿Qué tapan esos palos?


             Me subo a la parte de arriba para verlo mejor. Esa garrafa ya me da alguna pista.

                     El pozo original, de que desde la izquierda sacaban el agua para la fuente.


6) Pozo y Lagunilla de la Cámara (justo a la derecha del término de Buenache, fuera de él): una vez encontrada la lagunilla de pequeño tamaño, buscamos el pozo, encontrándonos muy cerca una losa de cemento que guarda un depósito de gran tamaño rebosante de agua. Entiendo que el antiguo pozo se reconvirtió en este depósito hecho seguramente al mismo tiempo que la laguna.

                                                 Encontrada la lagunilla de la Cámara.


                   Y al lado de ella está especie de deposito (¿cámara?) que se ve antiguo


                                                 Con bastante agua en su gran interior.

Pero en el último momento antes de volverme, me parece ver al otro lado de la lagunilla como a unos 15 metros, unos palos puestos en forma de círculo. Voy hacia allá, y, ¡eureka! Allí está el auténtico pozo de la Cámara, tapado con palos, con las piedras en la primigenia mampostería circular y con agua en su interior. Con este descubrimiento, llego a la conclusión que solo hubo este pozo originalmente, y, tiempo después, se creó la laguna y ese otro pozo-depósito con la losa de cemento.

                 Bordeo la laguna y vengo hasta este punto donde me encuentro el pozo.


                                                                 Más autentico imposible.


Vean las piedras con su forma original todavía. Entiendo que los palos puestos sobre los pozos, además, de avisar que esta ahí el pozo para que no caigan los animales, ayudaran a que tarden más en colmatarse.


7) Fuente de Cubillo (X) y su Lagunilla (Justo en la ladera sur del Cerro del Alto de Pozorruz): Lo 1º que vemos en estos prados es una pequeña lagunilla, que recibía las aguas de esta Fuente del Cubillo, que comprobamos que su manantial se secó y ya no existe, pero en su lugar, quedan como testigos mudos de aquel pasado, una bonita canalización en roca y un gamellón de cemento, a pie de la lagunilla.

                                  Lo primero que localizamos, lógicamente, es la lagunilla.

                          En esta parte, curiosamente, sobresalen unos hermosos pinares.


                                  Resto de la bonita canalización en roca que aún subsiste.


Y del abrevadero de hormigón donde el manantial lo llenaría , yendo el excedente a la lagunilla.



Hablando de árboles, por TM se encuentran multitud de ejemplares como los de la foto y más grandes todavía.


Aunque si hay algo que destaca, son las sabinas que hay muchísimas (de hecho, debe ser uno de los más extensos sabinares del país), y muy gordas, como las de la foto, donde he puesto mi palo para que calibréis.


8) Pozo del Vértice Radilla: Todo un golpe de suerte encontrar este pozo, que en los mapas actuales no viene, pero en los antiguos sí. Al ir a visitar el vértice geodésico, me tope de chiripa con él, y fue una alegría, pues está ubicado en una loma alta, es decir, es el primer pozo que descubro que no está en el fondo de una vaguada, vallecete o barranco. Estos pozos ubicados en lugares tan poco propicios existieron (seguramente como el Pozo Borrucho), pero fueron los primeros que se secaron y colmataron de tierra. 

Este del vértice Radilla está en proceso de colmatación, pero aún es visible la estructura circular de piedras y mampostería, incluso alguna viga que hace de travesaño para bajar el cubo. Entiendo que estos pozos al estar ubicados en lomas altas (más alejada del acuífero subterráneo) eran más profundos; de ahí que aún exista, aunque dentro de unos años desaparecerá completamente colmatado de tierra.

El vértice Radilla (1365 metros) puesto en una loma más alta que los valles vaguadas que lo rodean.  Me acerqué a verlo sin ninguna pretensión.


Y la sorpresa fue mayúscula pues me encontré este pozo que en los mapas actuales no viene, pero luego comprobé que en los antiguos sí.


El proceso de colmatación avanza, pero aún podemos observar casi un metro de la estructura original a la vista.


Ese madero clavado con estructura de piedras abajo y arriba me hace pensar que era parte de travesaño donde tenían atado con una cuerda el cubo y bajarlo a por agua.


Por el sitio donde está, debiera ser un pozo profundo, y se seguirá llenando de tierra y ramas paulatinamente hasta que desaparezca dentro de unos años.



9) El Navajo de Mollana: Aquí la supervivencia del topónimo nos habla de un lugar antiguo, en el que, por las circunstancias naturales de ser una hondonada con mal drenaje natural (debido a la preexistencia de arcillas de manera natural), hizo que el agua de lluvia quedara almacenada más tiempo. 

No está dentro de ninguna vaguada o barranco en lo que sería el cauce de algún arroyo, por lo que, como trascurra tiempo sin llover, se termina secando; como ocurre en esta foto, en la que seguramente con la Borrasca Filomena se llenaría, y casi dos meses después sin llover, se ha secado completamente.

Es la primera charca o lagunilla que no está en el fondo de una vaguada o valle. De ahí, su carácter natural y la prontitud en que se sequé.


Tierra arcillosa natural, que hizo que fuera un punto de agua para el hombre de antaño, al menos por unos meses.


10) La Lagunilla de la Rambla del Sagato (al este de la Casa Prado de los Esquiladores): dicha rambla con forma de alargado valle se puede considerar como las primeras aguas que van a parar al célebre Arroyo del Boquerón de la Toba. La Rambla pasa cerca de la Casa de Prado de los Esquiladores (Base de la BRIF), y justo antes de entrar en un brazo del barranco del Boquerón, se hizo hace muchos años la Fuente Peñuela, que se encuentra un poco semi abandonada. Este manantial de donde sale la fuente ya se considera el exiguo curso exterior de arroyo de la cueva del Boquerón.

                  Bajamos al valle de la Rambla del Sagato que nos recibe así de encharcado.

                                         La lagunilla es otra de esas que son muy bonitas.


                             En otra ocasión, fuimos a verla con otra luz y más en primavera.


Si seguimos bajando la rambla del Sagato hacia el barranco del Boquerón, nos encontramos la Fuente Peñuela, seca en esta ocasión veraniega.

Con una serie de obras hecha alrededor.

Para sacar el agua a través de una especie de acueducto que desembocaba en un gamellón de piedra y cemento.

11) Las Lagunillas de la Finca Dehesa de Cotillas.  Dentro de TM, y más concretamente, del término de Cuenca ciudad,  nos encontramos con 2178 hectáreas de esta finca privada. La finca perteneció a diversos dueños particulares hasta que fue adquirida por la desaparecida IRYDA. En 1995 se integró con el ICONA y hoy en día, el Organismo de Parques Nacionales es quien es el titular, y quien lo gestiona es el grupo TRAGSA. Su función es variada, ya que por un lado es una finca cinegética, y, donde por ejemplo, la cercana BRIF hace diversos ejercicios de limpieza de monte y práctica de actividades.

Una de las particularidades de la finca es la existencia de fuentes, como la del Huerto, la del Cubo o la de Juanlengua, cosa muy relevante ante la escasez de este tipo de recursos en TM, como hemos visto anteriormente. Al necesitar permiso, me quedó con las ganas de enseñaros esas fuentes y algún que otro pozo, como el del Espino. En su lugar os enseño un par de lagunillas que se ven desde la carretera, al otro lado de la valla.

                                                                      Las Casas de Cotillas.

                                          Una de las lagunillas al lado de la carretera.

                                                                               Otra de ellas.


12) El Pocillo de los Llanos (al sur del pueblo de Beamud): En el límite noreste de lo que se considera TM, encontramos este pozo, hoy en día tapado con una estructura de cemento, y al lado su propia lagunilla. Este pozo se encuentra en el área del que nace el alargado valle de Prado Ciervo, que es lo que se considera el límite norte - sur de la comarca de Tierra Muerta.

   El pozo a la derecha en primer plano, la lagunilla y al fondo, el Monte Cerecea de Beamud.

Lagunilla que aún guarda esa estructura pensada para sacar agua en caso de necesitarla, aunque vemos que a finales de Julio que la visite, apenas aguanta con agua.

                                                  Toda esta parte es muy rica en fósiles.


13) El Valle de Prado Ciervo (límite este de Tierra Muerta): de alineación norte a sur y muchos kilómetros de longitud, marca el limite por el lado este de Tierra Muerta. El suave valle se vuelve más agreste según baja y se convierte en la Rambla de Prado Ciervo, un barranco más intrincado, que desemboca en la Rambla Verde, metros antes de hacerlo las dos ramblas en el río Guadazaón.


Valle de suaves laderas e interior que suele estar verde todo el año, como en esta ocasión del agosto pasado.

        No obstante, me encontré con algún manantial que aún aguanta con algo de agua.

             Con estos dos abrevaderos, para que el ganado beba y paste en este verde valle.


                     Unos cientos de metros más abajo está la Lagunilla de Prado Ciervo.

                                        Que la podríamos llamar de Prado Batracio.

Con su brazo que termina en la típica estructura para sacar agua, ya vista en otras tantas lagunillas.

                Pese a estar en el mes de un agosto seco, está lagunilla aguanta bien de agua.


14) La Lagunilla del Robardillo y la Fuente del Agujero.  Cuando se acaba el valle de Prado Ciervo, y comienza la Rambla, tenemos en un lado del valle una casa, la del Robardillo, hoy en día convertido en un destartalado asentamiento ganadero. Abajo en el valle nos encontramos una pequeña lagunilla, y en una grieta de la paredes rocosas un peculiar fuente.

                           Vamos primero a un lateral porque en una grieta de estas......

                            Tenemos otra de las pocas fuentes de TM, la del Agujero.

                      Una maravilla ver su canalización hasta llegar a este pequeño estanque. Estas fotos tendrán unos diez años, pero es posible que ahora esté con agua.

                    Encima de la fuente, está la grieta por la que se puede subir a la parte alta.

                                                Un poquito más abajo, está la Lagunilla.

                                                   De pequeño tamaño pero gran belleza.

                                                       La mires desde donde la mires.


15) La Cantera de los Obispillos: Al norte de TM se encuentra esta sorprendente cantera de gran tamaño. Como desconozco el nombre, le he llamado con el topónimo que pone en el mapa cerca de ese punto; seguramente tenga su nombre verdadero. Llama la atención, como digo, su tamaño, y mi hipótesis es que de ahí se sacara la piedra para la construcción del poblado de la Central Hidroeléctrica del embalse de la Toba, para alguna construcción de Buenache de la Sierra y/o para la construcción de la Casa Prado de los Esquiladores, base actual de la Brif, incluso del cercano caserío de Cabeza Gorda, aunque este caserío, probablemente, es de más antiguedad que la cantera.

                      Llegamos a ella andando, y nos llama la atención el tamaño.

                     Se ve como construyeron una rampa para que bajaran los camiones.

Alrededor de esta cantera hay unas cuantas construcciones relacionadas con ella, que me confirman el trasiego que tuvo que haber por aquí.

  Lo que queda del Caserío o Rento de Cabeza Gorda, otro de los pocos lugares habitados de TM.


15) La Sima de las Grajas y la Sima de Tierra Muerta: como representación de las muchas simas que hay por esta comarca os voy a poner solo dos, encontradas gracias a las indicaciones del libro del AE GET sobre la Cueva del Boquerón y entramado espeleológico de Tierra Muerta. Otra vez reitero mi agradecimiento a ellos por su implicación y perseverancia de tantos años viniendo a esta comarca a intentar desentrañar sus misterios.

Primero una foto de la Sima de Tierra Muerta, con su cartelito avisando del bajo nivel de oxigeno, e intuyéndose un buen pozo de caída.

      Vamos con la sorprendente Sima de las Grajas, que primero tiene una gran circunferencia, asemejándose más a una pequeña torca o dolina.


                    Y luego dentro tiene una 2ª boca circular de buen tamaño también.


                                   Demos la vuelta para verla en otras perspectivas.


Vemos que dentro del todo tiene una puerta de entrada como de unos diez metros de altura. ¡Menuda preciosidad de simaca!

Decir que está peligroso acercarse al borde, ya que a la inclinación se suma la fina pedrera de las laderas de esta sima.

Como bien cuentan en el libro de los 50 años de la exploración de la Cueva del Boquerón, en su empeño de acceder a llegar después del tercer sifón de la Cueva del Boquerón a través de una de las muchas simas que hay por la zona, el mayor impedimento que se están encontrando es que todas estas simas, cuando llegan al final, se las encuentran taponadas de muchas capas de piedras, ramas, tierra y barro, huesos de animales muertos, incluso basura, que a lo largo de los incontables años han sido llevados allí por arrastre de las lluvias, con el consiguiente resultado de ser infranqueables, y en muchos casos, con niveles bajos de oxígeno.



Y con esto, termino esta doble entrada dedicada con minuciosidad a buscar y enseñaros elementos que pueden pasar más desapercibidos, pero que ahí están con toda belleza e interés, y que guardan en su interior un rico pasado que me da verdadera lástima que se pierda.

Dedicarle la entrada a miembro del AE GET (o relacionado con ellos) que se puso en contacto conmigo para regalarme el recién editado libro de los 50 años del Boquerón. La cuestión que ya se había adelantado mi amigo Paco y me lo había regalado él.

También dedicársela al padre de Inma y Myriam, que, aunque solo le conocí de vista, me hubiera gustado tratarlo más y poder preguntarle por su infancia y adolescencia allí, antes de bajarse a Cuenca a trabajar cuando tenía entre 15 y 20 años.

Y por último, como no, a mis padres. No había fin de semana que no fuéramos a TM para ir a pasar el día en los merenderos de la Fuente del Arenazo y de la Fuente de las Tablas para que, nosotros, niños ansiosos de campo, disfrutáramos correteando por allí. En especial, a mi padre, otro caminante de TM, al que me imagino irse multitud de tardes a ver viejas sabinas y piedras singulares, al igual que hago yo en estos otros días.

Serranía y Libertad!

Comentarios

  1. Hola Toni.

    Cantidad y calidad. ¡Cuanta vida en Tierra Muerta! Enhorabuena.

    Un saludo.

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    1. Hola Luis.

      Pues si, por algo lo nombraron hace años con la figura de Monumento Natural. La verdad que, más allá del interés que pueda tener esta doble entrada para unos más que para otros, lo mejor es ya te puedes imaginar cómo me lo he pasado, tanto saliendo esas horas colgadas que se me quedaban (debido a compromisos en la ciudad) haciendo rutas cortas, como luego elaborando las entradas en casa. He disfrutado mucho en esa doble vertiente.

      Un saludo.

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  2. Hola Toni,

    Muchas gracias por haber compartido toda esta información que has ido recopilando y que ha servido para darnos a conocer la gran cantidad de lagunas, lagunillas, pozos y preciosos rincones que existen en Tierra Muerta.

    Salud y Tierra Muerta forever!!!!

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    1. Hola David.

      Como comentaba en la 1ª entrada en el I+D me encuentro suelto, y disfruto al máximo, como le decía a Luis.

      Si en una de las muchas salidas cortas no encontraba pozos (por estar desaparecidos o no encontrarlos) volvía a Cuenca con cierto fastidio, pero, si al contrarío, daba con uno o dos de ellos, me entraba mucha alegría.

      Ha sido de las exploraciones, que a priori no tan espectacular como fueron las de buscar restos históricos celtiberos o medievales, pero si de las que más satisfacciones me ha dado, por ese empeño de descubrirlos, explorarlos y catalogarlos.

      Salud y viva Tierra Muerta.

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  3. Hola, señor de la Terra Incógnita.

    Tierra Muerta es... tierra viva!! Ya le has echado paciencia para descubrir y catalogar aquello que existió y lo que aún perdura. Estas lagunillas dispersas nos hablan de vida en una tierra tan áspera, dura y en ciertos momentos sobrecogedora. Fascinantes esas tierras rojas y tristeza por la imagen de ese pozo agonizante y colmatado del vértice Radilla. Y por lo que veo, Prado Ciervo bien merece un buen paseo en su esplendoroso verdor. Lástima no poder disfrutar de ese refugio del Cerro del Toro. Me encanta ésta Tierra Muerta!!
    Gracias por tu minucioso trabajo, Toni. Un abrazo.

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    1. Hola Andrés.

      Gracias por tus palabras. Recuerdo la primera visita que me encontré un pozo de casualidad, y ahí me llegó la idea de encontrarlos, y después todo fue sucesivo, y en todas las salidas con más o menos suerte en la busqueda, he llegado a conocer TM con más profundidad (hay que decir que sin la ayuda de mi 4X4 no hubiera sido posible, ya que muchos de estos sitios estaba lejos de cualquier signo de civilización. En todo caso, después de estas dos entradas me siento aún más ligado a esta comarca.

      Un abrazo.

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  4. Hola Toni.

    Magnífica segunda entrada sobre la Tierra Muerta, sus pozos y lagunas, que no hace más que confirmar lo mostrado en la primera; un excelente trabajo de campo y una pasión por esta tierra tan peculiarmente bella. Además de esa pasión creo que ha quedado bien plasmado en las dos entradas el disfrute que te ha supuesto esta investigación, tanto sobre el terreno como luego documentándote y redactando en casa.
    De todos los pozos mostrados, me quedo con el de la Cámara, más genuino imposible, y es que además, esos tronquetes colocados para evitar la caída de bichos le otorga un toque tétrico.

    Y esa soledad, virginidad y medio poco alterado del que hablas también se ha visto transmitido en las fotos.

    Mi más sincera enhorabuena por estas dos entradas que te has currado.

    Un abrazo.

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    1. Hola Dani.

      Gracias por tus palabras. Si es verdad que si te lees las dos entradas de cabo a rabo es cuando el paisaje de esta ingente comarca llega más y se aprecia esa soledad, y, bien sabes tú, lo que suelo gozar este tipo de exploraciones, aunque a priori de algo tan poco atractivo como son los pozos. Recuerdo eso pozo que vimos el otro día en Mas del Maraco, allí arriba solitario en ese erial rodeado de desniveles, y necesario absolutamente para la supervivencia de la que vivieran en esa Masía, al igual que los de TM, necesarios para habitantes de las casas y rentos.

      Un abrazo.

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  5. Hola Toni.

    Bueno, viendo algunas fotografías, nadie daría por cierto, el topónimo de Tierra Muerta, porque hay lugares realmente bellos y llenos de vida, como la lagunilla de la Rambla del Sagato.

    Buen trabajo de campo, seguro que habrá sido gratificante, ir localizando uno a uno todos estos pozos, aunque también habría, momento de desasosiego, que no es fácil localizarlos sobre el mapa.

    Felices fiestas.

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    Respuestas
    1. Hola Eduardo.

      Si es cierto que he querido poner fotos de aquello en epocas buenas de lluvia y humedad, a así, muchas fotos son de despues de Filomena, y las de la Rambla del Sagato son de antes, una primavera super húmeda. Como pasen dos meses sin llover (cosa muy usual en estos dias de calentamiento global), todo el suelo se empieza a cuartear.

      Y si la busqueda de pozos y lagunillas ha tenido de momentos buenos de encontrar varios de una tacada o ninguno en dos o tres horas por ahí caminando.

      Felices Fiestas.

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